Querido Lunes, esta carta es para ti

Querido Lunes:

¡Qué rápido llegaste! Vengo de un fin de semana muy divertido con mis hijos, de disfrutar de sus risas, sus abrazos e incluso de las situaciones cuando le pido a Diosito de tantita paciencia, entonces ÉL busca la señal que yo entienda para decirme “son niños, disfrútalos en todos sus momentos”.

Cada semana cuando llegas, pienso que es el reinicio, la oportunidad de hacer cosas nuevas, de salir adelante, de proponer, de hacer una nueva amistad, de crear un buen tema, de salir a caminar, de sonreír de coche a coche a una mamá cuando me la cruzo a la hora de ir al colegio, de “ahora sí” terminar de limpiar de juguetero de mi hijo, de hacer un menú mas saludable para mi familia… es así que me lleno de posibilidades infinitas, de las cuales hago una o dos, porque siempre pienso “vendrá otro lunes” o como decía antes “para cada dieta se inventaron los lunes”.

Lo que a veces se me olvida es que con cada visita puntual tuya mis hijos crecen un poco mas, que los zapatos de mi hija que dejó hace unas semanas no los volveré a ver, siempre serán nuevos con números mas grandes; que los dientes de mi hijo pronto necesitarán ortodoncia y ya no se verá tan niño, y la verdad Lunes, es que eso me pesa.

Cuantas mamás no pensamos “¡Por fin es Lunes!” y mandamos a los chicos a la escuela, creyendo que así nos dará tiempo para hacer muchas otras cosas: en la casa, en la oficina, ir al gimnasio, la cita médica, las compras de la semana… tantas cosas con las que nos diversificamos y que hacemos cuando ellos, nuestros hijos, no están.

Me incluyo en esa lista. Aunque no es para sentirme mal y entiendo que parte de su educación está en la escuela, a veces tú Lunes, me sabes un poco a separación, cuando osas interrumpir mi tiempo con ellos.

La verdad amigo Lunes, es que sé que invariablemente llegarás cada siete días, es parte de nuestra vida, de nuestro girar en el mundo. Me gustas tanto y a la vez me alejas de lo que mas amo que no sé como sentirte.

¿No es raro? Prométeme que cada que llegues, me traerás una canasta enorme de oportunidades, para crecer, para ser positiva y para lograr que mis humanitos sean mejores cada día y disfruten como yo cada Lunes del resto de sus vidas.

Y bueno mi querido Lunes… ¡Nos vemos muy pronto!

Foto: Vía

¡Sí­guenos en Facebook! Da click aquí Mamá de Alta Demanda.