Esta oración llegó a mi de manera sorpresiva, a veces buscamos una señal divina para saber si lo estamos haciendo bien en la crianza de nuestros hijos, no todo es buscar información para guiar nuestro criterio, si no mas bien un guiño de ojo que nos permita entonces tener esa paz.
Nadie nace sabiendo ser padres, pero hoy estas palabras me han reconfortado el alma, desconozco su autor pero son tan hermosas que bien vale la pena compartir.
Ayúdame, Señor, te lo suplico
A entender a mis hijos, a escuchar pacientemente y contestar sus preguntas sin alterarme
No permitas que los interrumpa y menos que los contradiga sin razón
Concédeme la gracia de ser siempre cortés para con ellos, como yo quiero que sean conmigo
Dame el valor suficiente para confesarles mis faltas y pedir perdón cuando les haya hecho algún daño
No permitas que hiera nunca con mis actos sus sentimientos o que me ría de sus errores y los castigue injustamente, avergonzándolos o poniéndolos en ridículo
Y, sobre todo, te pido Señor que nunca descargues en ellos mi ira, tan solo para satisfacer mi egoísmo; jamás permitas que los induzca a mentir o a robar
Hazme cada día más humilde y que deje de sermonearles continuamente, ciégame para no ver los pequeños errores en mis hijos, pero dame luz para ver las cosas buenas que tienen y que hacen
Cuando salga de mis casillas, ayúdame Señor a contener mi lenguaje, pon siempre en mis labios la palabra justa para cuando merezcan elogios
Ayúdame a tratarlos de acuerdo a su edad, no permitas que les robe la oportunidad de cuidarse ellos mismos y que piensen y lleven a cabo sus propias decisiones
Permíteme que pueda concederles todas las satisfacciones, que sean razonables, pero dame el valor suficiente para negarles cualquier privilegio que pueda perjudicarles
Permíteme que sea tan equitativo, tan justo y amigable para con ellos, que sientan auténticamente estimación por mí
Concédeme Señor Todopoderoso, que sea siempre digno de que mis hijos
me amen y me imiten en lo bueno
Foto vía
¡Síguenos en Facebook! Da click aquí Mamá de Alta Demanda.