¿Qué significa ser una mamá bloguera?

Aún recuerdo el momento que escribí mi primer artículo. Fue una noche en casa, con mi pequeño a unos meses de cumplir su primer año. Era de noche, la mejor hora para inspirarse y aventurarse a cosas nuevas. Fue muy corto y decía más o menos así:

Soy nueva en esto de los blogs… en la creación de uno personal, no así en sus lecturas. Tengo uno favorito, al que le sigo mucho la pista, pero no tiene nada que ver con ser mamá y sus peripecias… ¡esa es otra historia! Heme aquí, frente a la laptop, con mi “tierno” dormidísimo a mi lado mientras mi marido ve Shrek 3. Me prometo a mí misma no dejar caer este blog, seguir con la práctica periodística, aunque ahora solo sea por este medio, porque mi profesión actual, es la mejor: ¡ser mamá!

De ese párrafo a hoy han transcurrido seis años, donde mi blog Mamá de Alta Demanda ha sido fiel testigo de muchas cosas que me han pasado. En él he compartido sobre mi gran experiencia con la lactancia materna. Con mi hijo mayor pudimos llegar hasta lactancia materna prolongada, en donde disfrutamos del estrecho vínculo por 3 años y 9 meses; al igual que con mi pequeña, con quien tuve 2 años y 9 meses. ¡Un gran número de meses entre los dos!

Pensaba que el final no llegaría, estaba tan cansada pero a la vez tan orgullosa que, cuando llegó el momento de la despedida, fue más difícil para mí que para ellos. De verdad inolvidable y recomendable para las futuras mamás. Les prometo un próximo post al respecto.

Otro tema, muy controvertido y también criticado por algunas mamás, fue cuando compartí el proceso de mi parto vía Twitter en 2010. Obviamente no publiqué fotos de mi hija mientras salía por el canal de parto. Más bien compartí “emociones y contracciones” durante la jornada previa, algunas fotos de la panza y camino al quirófano. Todo documentado en un artículo, hasta la presentación de mi bebé.

Antes de ello di la noticia de mi embarazo así como todos sus pormenores. Cada semana compartí con otras madres embarazadas lo que sentía, y ellas a la vez comentaban qué pasaba; la interacción era muy fuerte y cálida.

Pasajes de mi vida, tristezas, emociones, alegrías y todo lo que un blog te permite hacer. He podido darle la mano a algunas mamás que se han acercado para algún consejo; he podido conocer a pocas de ellas personalmente, pero las he visto en su mayoría caminar en su aventura materna.

Con otras he entablado una cercana amistad; se han convertido en parte de mi día, y aunque solo sea mediante las redes sociales, es bonito imaginar lo bien que podríamos llevarnos si tan solo viviéramos en la misma ciudad. Pero algo es cierto: sabemos que podemos decir “hola” con un solo clic y allí estaremos.

Cada año, cerca del aniversario de Mamá de Alta Demanda, pienso lo mismo. El blog solo me ha dejado cosas buenas, le estoy muy agradecida por dejarme plasmar en su lienzo mis historias. No sé si grandes o pequeñas, pero sí que son mías y para quien quiera leerlas. En mi aventura de ser madre bloguera he cosechado grandes amigas dentro y fuera de mi país.

Eso me ha ayudado a crecer en mi maternidad más de lo que hubiera pensado. Es un placer poder intercambiar opiniones con muchas otras mujeres sobre la crianza de nuestros hijos, saber que no somos las únicas que pasan por esta situación: darse cuenta que queremos crecer y ser mejores.

Muchas gracias a mis hijos por hacerme una mamá de alta demanda. Gracias a quienes nos han acompañado por seis años.

¡Feliz blogger aniversario y a festejar con un regalo muy especial! Si quieres saber de qué se trata te invito a darte una vuelta por www.mamaaltademanda.com ¡Te espero!

Crédito de la foto:  Flickr/ Anonymous Account.

Post escrito por Any Fuchok y publicado originalmente en Disney Babble Latinoamérica.

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